Más tarde, el Iberia y la Sociedad Gimnástica Alemana utilizaron también dicho campo. El campo estaba sin vallar, pero rodeado de una profunda zanja para evitar que las carretas de bueyes del barrio del Ciego convirtiesen el lugar en un vertedero. Después de negociar también con algunos clubes ingleses, Canales se decidió por el Real Madrid, con el que se vinculó para las siguientes seis temporadas.