Durante la temporada 2002-2003, con Gregorio Manzano en el banquillo, el Real Mallorca ganó la Copa del Rey disputada en Elche ante el Recreativo de Huelva por un total de 3-0, con un gol de Walter Pandiani y dos de Samuel Eto’o. Comienza jugando de delantero hasta que su entrenador, ante las numerosas bajas, decide colocarlo en el centro de la zaga.